Tradicion

29 de agosto en 2010

 

Tradición

 

En otro tiempo, decíase que al salir el gaucho a campo abierto, de botas, con bombacha común, con la faja bien puesta y un cinto de monedas fuertes...

Despertaba el indio.

Aborigen que, aparte de una cautiva lograda haciendo malón contra los poblados, la única yegua blanca que conocia era la que trajeron los adelantados y conquistadores europeos.

Eran buenas yeguas. Y se las podia domar con caricias y palabras en tono suave.

El aborigen, de pensamiento simple, rústico, un tanto cerrado a otras ideas y propuestas, habria razonado que con el gaucho podia darse alguna clase de monta también.

No es difícil figurarse el encuentro en medio de la nada con alguien solo, de bombachas, botas y faja bien ceñida.

Tal vez hablándole con suavidad y algunas caricias...

Vaya uno a saber que pasaria.

Acaso equivocara el significado al saber que el paisano montado salia a campo abierto. No abierto él a cualquier proposición, posición, oposición o disposición.

¿Qué podia saber de semántica castellana el nativo?.

No salia a campo, abierto el gaucho.

Quien sabe si la guerra contra el indio comenzó por un "quítame de ahí esas pajas" o por un "dejá de manosearme así, indio bruto".

Cosas ambas que abundaban en la soledad pampa.

El indio vivia en comunidades pequeñas. Quizás algunos quisieran probar experiencias nuevas con personas nuevas. O experiencias extrañas con personas nuevas. O experiencias nuevas con personas extrañas.

Vaya uno a saber...

Supongo que cabe recordar que no sólo el chamamé es argentino, lo es también el tango. Que bailaban guapos y compadritos de ajustado traje.

Pero ahí ya habia diarios y postines informativos. En cambio, en la época colonial, era de boca en boca la noticia. O con guitarreros payadores y similares. Bien pudo el gaucho, por su viveza criolla, no sólo comprar su arte sino también su silencio.

Se sabe, por mentas (que podian ser amenizadas con otras bebidas aparte del anís) que por el mismo lapso de tiempo aparecieron las historias de aparecidos.

Estas menciones eran historias de almas en pena, quejumbrosas y buscando revancha. O reivindicación. Quizás buscando un perdón.

Con el susto provocado, era difícil que los puebleros le dieran una mano a alguien que venía en tan lamentable condición. Alguien con la faja floja, las botas perdidas, así como la mirada; que no sólo tenia roto el fondillo de la bombacha sino también otras partes... de la vestimenta.

Vaya uno a saber que pensarian.

Por esos lugares y épocas podia escucharse que alguno habia sido visto bien monta'o. Pero por la simplicidad de lenguaje, nos queda la duda morbosa.

¿Bien erguido, sobre el lomo de un buen caballo criollo o muy alza'o, debajo de algún bruto padrillo pampa?

Luego, claro está, se hace tradición, estilo, usos y costumbre.

100 % Diego

 
ya hubo 17 visitantes (20 clics a subpáginas) pasando por este sitio.
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis