El 7 (o culo) es un objeto de veneración entre muchos que tiene la mujer argentina o el hombre brasileño, por citar dos ejemplares. Y un objetivo que raya entre la locura para algunas personas y el fanatismo para otras.
Como es natural, se ven de todo tamaño, consistencia y apariencia (de aparecer por debajo del pantaloncito o faldita).
Separaré en grupos.
7 de oro: de primera. PPV (Pago Por Ver eso). También conocidos como cola Reef. Envidiables o envidiados. Admirados o difamados. Nunca en término medio o indiferencia; excepto por andróginos.
7 de copas: no es premium, pero tiene o tuvo condecoraciones, aplausos, silbidos y otras expresiones de gozo. Mejoran muchísimo cuando el observador tiene unos 10 vasos ingeridos.
7 de espadas: es de los que han servido de funda para sables y (o) espadines. Suelen moverse con soltura. Aunque así lo parece, no son los erguidos ni los "sueltos". El dato revelador estaria en los muslos en realidad.
7 de bastos: es el magro, el flaco. Duro como de palo y acompañado por dos piernas del mismo estilo. Difíciles de vestir con elegancia y sensualidad simultáneas.
7 de corazones: suelen verse con el encanto engañoso del enamoramiento. Lo desean porque anhelan a su dueña. Lo acarician porque desean a su dueño.
7 de tréboles: el rústico.
7 de diamante: sólo para exhibir. Su propietario trabajó mucho para lograr esa calidad y mantenerla. Es tal el celo protector que, si pudiera, lo dejaria en custodia del banco.
7 de piqué: es aguerrido, firme. De deportista. El resto del cuerpo está acorde con este culo. Cuando no está tenso, está brioso.
100 % Diego
[14-abr-2011]
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