En la madrugada de ayer se produjo un accidente automotor-hogareño que involucró mucho dinero en el saldo final del acontecimiento.
A las 2.30 ingresaba por el sudoeste de la ciudad un gran transporte de mercaderia, según lo programado. En el pasaje Panamá casi sobre la cortada T. Amarú el camión giró antes de tiempo y se incrustó en el domicilio particular de la sra. Cudila y su familia.
En el estruendoso embiste de la parte de adelante -la del chofer- contra una parte más privada del frente de la sra. Tomasa -su inmueble propiamente dicho- hizo que despertaron violentamente no solo los integrantes de la casa sino también el chofer.
El conductor del camión necesitó de la ayuda de una pareja -mixta- que estaba en la sombra del único árbol frondoso de la vecindad porque no podia desabrocharse el cinturón y apearse. Aunque si hubo flatos propios del susto y nerviosismo.
El joven integrante de la pareja se trepó por el estribo del lado del conductor para amonestarlo oralmente por el feo polvo producido.
Luego de algunos recuerdos de ética y costumbres de la progenitora del boludamente obeso transportista, lo ayudó a soltar el cinturón que abrazaba también el volante.
Según la indagatoria posterior del personal policial, el volante no es lo grande sino el abdomen del operario.
Este habia entrado en pánico en el momento de recobrar la conciencia y al intentar vestirse y calzarse no tuvo en cuenta su entorno inmediato a su contorno personal.
Trascendió que al robusto chofer le gusta manejar suelto de ropas, como cuando duerme siesta.
Hubo un momento de tensión sicológica al suponerse una escena de depravado nudismo del chofer al vérsele mucha piel sin cubrir, lo que ocasionó la súbita y simultánea presencia de curiosos listos a brindar opinión; inclusive a tomar testimonio fotográfico y audiovisual.
Afortunadamente no hubo muertos que contar y los alimentos perecederos fueron oportunamente descontados y reorientados de su destino original a un barrio marginal cercano con voluntarios que deseaban aligerar el peso impuesto brutalmente a doña Cudila.
100 % Diego
[18/03/2010]
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