2015.06.03 ¡Hasta la próxima, solos y solas!

TIPOS SUELTOS

¡Hasta la próxima, solos y solas!

Por: Daniel Zalman

Todo tiene un final. Vaya si lo sabremos los que emprendemos el camino de los 40 con una separación y/o divorcio a cuestas, hijos y muchas historias que algunos leerán como fracasos pero nosotros nunca: son sólo sumas de experiencias que nos preparan mejor para el próximo fracaso :-)

Y he aquí el primer consejo para todos los lectores y lectoras que me acompañaron estos dos años con sus observaciones y recomendaciones: siempre se puede sacar algo de bueno de cualquier cosa. Si una cita salió mal porque uno se arrebató y quiso tener sexo a la primera oportunidad, más vale que aprenda: paciencia, ya habrá alguna chica que acepte en la primera salida. Si una mujer te rechaza en un baile tres veces, no te des por vencido: seguí hasta que te hagan echar por personal de seguridad. Si desde que estás solo tu salud es un desastre porque comés cualquier cosa, repensá tu vida. O al menos cambiá de marca de atún.

De todas maneras, así como me ven a esta edad, estoy hecho una pinturita. Claro que no falta alguna que otra molestia propia de la edad, pero nada no esperable: una hernia de disco, una hernia inguinal en ciernes, hemorroides, ácido úrico alto, presbicia incipiente, impotencia aleatoria, calvicie, hipertensión arterial y sinusitis. Pero la sinusitis es crónica, desde que era chico, así que no cuenta.

Los solos y solas tampoco nos dejemos vencer por aquellas parejas que hacen alarde constante de su felicidad: seguramente no disfrutan de toda la libertad que sentimos nosotros los sábados a la noche, cuando podemos prender la tele a cualquier hora sin que nadie nos rete. Nuestros hogares nada tienen que envidiar al de esas parejitas felices... es cierto que aún me faltan algunos utensilios indispensables, pero a mis hijos no les molesta tomar la sopa con cucharita de té. A ellos les encanta venir a mi departamento porque les hace acordar a cuando van de campamento. Educación para la supervivencia, se llama.

Fue grato relatar las exitosas aventuras que debí sortear en estos dos años y muy grato también recibir infinidad de mensajes de los lectores. Tomarse la vida con humor y quitarle dramatismo a todas esas situaciones no sólo es indispensable para encarar esta etapa: también nos ahorrará una fortuna en terapia. ¡Hasta la próxima!.